Los viajes inesperados son más divertidos ¿cierto?...
E L V I A J E

Pues así nomás, el jueves por la tarde le dije a mi pareja "¿nos aventamos o qué?" y ahí comenzó todo.
Lo primero era encontrar el destino con el hospedaje ideal para nuestra comodidad, lo cual significa que tendría que ser "pet friendly" (admitir mascotas) y encajar con mi concepto de "comodidad" (particularmente con el mío, pues el de mi pareja es menos exigente)
Encontré un hotel en San Luis Potosí con las características necesarias. Así que el viernes por la mañana nos subimos al auto y condujimos 5 horas aproximadamente hacia el destino marcado.

Para mi pequeña "Gorda" fue difícil la experiencia, fue su primera vez viajando en auto durante más de una hora, entre el calor y los nervios su expresión fue la misma durante todo el trayecto: "¿de quién fue la idea?!"
De igual forma no perdió oportunidad de asombrarse con el paisaje tan desconocido para ella como para nosotros.
Los sonidos, los olores, la vegetación, la fauna...todo era motivo para mirar (aun si no tuvo oportunidad de dormir un poco)
En el viaje de regreso estuvo más tranquila, se durmió casi todo el trayecto y descansó en el asiento trasero del auto.
Una vez en San Luis lo primero es la notoria diferencia respecto del tráfico y el cuidado de las vías - en mi rancho no hay tantos baches y la cultura vial es muy distinta - me sorprende cómo las personas atraviesan grandes avenidas sin considerar ni la distancia ni la rapidez de los autos (y es que a decir verdad no hay muchos puentes peatonales). Pareciera que se consideran inmortales; entiendo que están acostumbrados y para ellos resulta normal, pero no deja de ser alarmante para los foráneos, pues en casos así existen más probabilidades de tener un accidente.
Cuando por fin llegamos al hotel y nos instalamos, decidimos ir a comprar algo para comer...
Pero eso es tema para la próxima entrada...
Yorumlar